Un turco que hablaba en voz alta con un amigo al filo de la medianoche del Viernes en la ciudad germana de Möchengladbach crispó a uno de sus vecinos alemanes, quien le disparó su arma y le mató en el acto, según reveló ayer la policía.
Dos turcos trataban de algún asunto en voz tan alta en la calle y hacían imposible el descanso de uno de sus vecinos, un comerciante de 57 años. El alemán disparó cuatro veces sus revólver desde la ventana del primer piso y alcanzó mortalmente a uno de los turcos, de 38 años. El otro no sufrió ningún daño.
El homicida, que reconoció su acción, no tenía "ningún motivo xenófobo", según un portavoz policial.
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